Vaig néixer a Sabadell el 27 de desembre del 1992, ciutat on he crescut i de la qual, tard o d’hora, en seré l’alcalde. És broma (o no). Sempre he viscut al Vallès, però les meves visites a Can Pixapí (Barcelona) han estat més que freqüents, tant per estudiar com per treballar.
Si tu, lector, ets forà i no coneixes exactament on cau o què pebrots és Sabadell (i, casualment, estudies català), pots consultar la Wikipedia, que està molt bé. Resumidament, et puc dir que no és només un banc, que és una ciutat on s’hi viu molt decentment i que està realment ben connectada amb Barcelona. Si et preocupa, t’ho dic: a les nits es pot dormir amb tranquil·litat.
A Sabadell vaig estudiar al col·legi Sant Nicolau i vaig treballar durant quatre anys a l’IKEA. Sincerament, fent de caixer, vaig passar una de les millors èpoques de la meva vida, ja que vaig coincidir amb un grup de persones, amics, amb qui em vaig compartir moments inoblidables. Quedi dit.
Amb disset anys, vaig començar la universitat a Barcelona. Tal com podeu veure en el meu Currículum Vitae que he penjat, vaig fer periodisme a la Ramon Llull (URL), una mica “pija” pel meu gust, però amb grans professors. Quatre anys llevant-me a les sis del matí per agafar el tren a les set i començar les classes a les vuit és MOLT DUR.
Ya estudiando, trabajé para una productora editando vídeos e hice prácticas en cuatro sitios distintos. Fue una época bonita, pero también dura, ya que no tuve tiempo libre para mí. Al final, creo que valió la pena. Hacer la carrera en Barcelona, y concretamente en la URL, me dio la posibilidad de juntarme con personas de ideología opuesta y de disfrutar de su vida nocturna. No soy mucho de bares y discotecas, pero de vez en cuando…
De todos los sitios donde me dejaron aprender, estoy especialmente contento de mi estancia en prácticas en la Creu Roja a Catalunya. Durante 4 meses (más uno de voluntario) vi como funcionaba un departamento de comunicación y, más importante, descubrí que en este mundo hay gente solidaria que se preocupa por los demás.
Cuando terminé la carrera, me contrataron en l’Agència Cristiana de Notícies FLAMA, un diario digital pequeñito. Tenía total libertad para hacer lo que quisiera y me ayudó a entender un poco como funciona el oficio de periodista. Tal y como explico en el apartado About me, en un momento dado, me cansé y me di cuenta que quería viajar. Dejé los dos trabajos que tenía (aún era empleado del señor Ingvar Kamprad por las noches y fines de semana) y me fui a Nueva Zelanda.
Cambiando drásticamente de tema, los catalanes estamos muy ligados a nuestra tierra. Muchos de nosotros consideramos que somos una nación, pero, por desgracia, la CONSTITUCIÓN ESPAÑOLA, para algunos sagrada e intocable, no admite entre sus letras tal afirmación. Es una pena, porqué, a mi entender, el Estado Español podría ser una gran nación de naciones donde la mayoría de gente se sentiría cómoda.
En general, en Catalunya se vive muy bien. Por la comida, por el clima y por la gente. Residir en el extranjero te ayuda a relativizar y ves a tu país desde otro punto de vista. Mi opinión con respecto a muchas cosas ha cambiado y si tengo que responder a la pregunta si me veo volviendo a mi tierra de forma permanente te voy a decir: sí pero cuando haya visto mundo.
23/08/2017